En Ada o el Ardor, Nabokov nos desgrana la relación entre Van y Ada a través de sus retozos nostálgicos, de sus confesiones, de sus disgresiones y de los logros, fracasos y pérdidas que viven a través de una sexualidad que ambos comparten desde una edad muy temprana, casi desde la pubertad hasta casi la vejez. A escondidas, siempre a escondidas porque son primos, primos carnales que disfrazan su tórrido enamoramiento de un amor casi filial.
Nabokov evoca a Van y Ada a través de su siempre dominio absoluto del lenguaje, lleno de belleza y poesía y arte, a veces claramente visual, otras veces algo hermético, entrelazando el inglés con el francés, y el ruso, siempre presente, como fue su lengua materna, y como es la de los personajes.
Una delicia, un clásico perfecto para este otoño.
Feliz 2013 y que sigas un año más ofreciéndonos tus interesantes sugerencias.
ResponderEliminarun abrazo
Feliz año a ti también, aunque con algo de retraso.
ResponderEliminarUn abrazo
Estoy nominando a todos los a los que echo de menos con la ilusión de volver a leerlos. Un abrazo https://techocolatecafe.wordpress.com/2014/11/09/liebster-award/
ResponderEliminar